Cuando
el tiempo pasa
y
el ocaso largo es,
te
encuentras con una rosa
de
ella caerá el rocío, gota a gota.
Tu
sed de esperanzas será mitigada
la
felicidad inmensa y real será
sin
embargo, el gozo en exceso,
malo
es, pues no cabrá en corazón alguno.
Gracias
al sino y a Dios
porque
las esperanzas perdidas estaban
sin
la belleza ni el perfume
de
tan tierna, dulce y hermosa flor.
Sus
labios siempre ardientes
sus
besos sin par, ni semejanza
dulces
y hábiles besos producen
conociendo
por ello infinito torbellino.
Todo
es diferente, Febrero mes caliente
te
llevo en mi mente y el corazón
si
no estás, siempre estás presente.
Si
llegas música celestial a mis oídos llega
condena
eterna la mía, dulce condena.
una
esperanza no esperada
mana
del cielo es
No hay comentarios:
Publicar un comentario