Al conocerte

Con tu mirada inocente me estremeces
Con tu sonrisa alegre me das paz
Con tu suave voz sensibilizas mi alma
Todo, todo, todo, lo vivido pasó, paso ya.

Más como no atender y tratar de entender
Cuanta luz tiene el sol
Cuanta luz tiene la luna
Cuanto brillo tienen las estrellas
Que encegueciéndome y confundiéndome
Nunca, nunca, dejaré de contemplarte
Si así el destino y tú lo permites
Más si no fuera así, ya tuve el cielo, luz, y gloría
Al conocerte, al escucharte, al verte
Luego, luego, DIOS ¡DIOS DIRÁ!
Así sea en la eternidad.